Para hablar del complicado panorama que tiene por delante el sector asegurador en relación con el marco regulatorio de seguros para factores y riesgos de sostenibilidad, en particular el cambio climático, tuve el placer de moderar uno de los paneles de la Conferencia Internacional ‘Banking And Finance In Stressed Times: Climate, Resilience And Exit’ que se celebró el 11 de mayo en la Universidad Carlos III de Madrid.

Los ponentes Michele Siri (Universidad de Genoa, EBI, y Chairperson, Joint Board of Appeal, European Supervisory Authorities) y Ramón Carrasco (Chief Risk Officer, MAPFRE) ofrecieron su visión sobre el importante papel que el sector asegurador y de pensiones puede jugar en la mitigación y adaptación al cambio climático o a los riesgos de sostenibilidad, a través de sus inversiones, productos y servicios. De hecho, una de las prioridades de EIOPA para 2022-2024 es hacer frente a los riesgos de sostenibilidad y, como tal, integrar las consideraciones de sostenibilidad en el comportamiento de los consumidores y de las compañías de seguros y pensiones con el objetivo de contribuir a una mejor gestión del riesgo.

Michele Siri se centró en el cambio climático como fuente de riesgo financiero y en la necesidad de asignar adecuadamente las responsabilidades de supervisión y gestión. Para ello, consideró que el cambio climático tendrá amplias repercusiones en la estructura y el funcionamiento de la economía y el sistema financiero mundiales. Además, dentro del marco de gobernanza de la aseguradora, las funciones y responsabilidades pertinentes asignadas al Consejo, la Alta Dirección y las Funciones de Control deben seguir adaptándose a la evolución de los riesgos, incluido el riesgo climático. El Consejo tiene un papel en el mantenimiento de la supervisión efectiva de la gestión de riesgos relacionados con el clima, incluyendo la incorporación de consideraciones relacionadas con el clima en el apetito de riesgo, las estrategias y los planes de negocio de la aseguradora.

También abordó las principales razones de la integración de la sostenibilidad en ORSA y en el marco de Solvencia II de la UE y la situación de la revisión de la Directiva Solvencia II, en particular a la luz del proyecto de informe publicado el 6 de junio de 2022 por el ponente del Parlamento Europeo para Solvencia II. Michele también consideró varias cuestiones importantes y las debatió durante el panel, tales como: lagunas en los seguros, si las enmiendas orientadas a la sostenibilidad representan un cambio significativo en los objetivos generales del marco de Solvencia II, hasta qué punto es necesario revisar el tratamiento prudencial de los riesgos de sostenibilidad y, por último, si la relación de una empresa de seguros hacia sus asegurados/beneficiarios evolucionará hacia una «relación fiduciaria» y sustituirá al «deber de diligencia» .

Ramón hizo un seguimiento de los diferentes aspectos del marco regulador de los seguros desde una perspectiva más práctica, señalando las crecientes demandas de los inversores y las partes interesadas. Al mismo tiempo, los reguladores, especialmente en Europa, están ejerciendo una gran presión sobre las compañías de seguros: desde el greenwashing hasta las obligaciones de información, pasando por el aumento de las obligaciones de los consejos de administración. Además, la integración de los riesgos ESG en todos los pilares del marco prudencial de las aseguradoras y, por lo tanto, la necesidad de la revisión de Solvencia II es una de las cuestiones críticas. Ramón consideró que aunque actualmente está claro que se está poniendo el énfasis en los riesgos relacionados con el clima, que es un riesgo emergente diferente a los desastres naturales, hay otros riesgos emergentes a tener en cuenta como los cibernéticos, la inteligencia artificial y los riesgos geopolíticos. Además, reflexionó sobre varios aspectos importantes: si basta con escenarios estándar en lugar de escenarios especiales a medida, los riesgos del cambio climático frente a los riesgos climáticos, y las métricas y calificaciones ESG.

También se refirió a los retos de integrar el cambio climático en el sector de los seguros, en particular dentro de los modelos en el proceso de suscripción, algo cada vez más importante a la luz del aumento de las pérdidas de bienes asegurados por fenómenos meteorológicos extremos. El segundo ámbito en el que el cambio climático tendrá repercusiones es el de las inversiones, en particular la gestión de activos a largo plazo, ya que las aseguradoras son algunos de los mayores y más diversificados inversores del mundo. En este doble aspecto de la materialidad, los marcos, definiciones y metodologías pertinentes en materia de seguros netos cero aún están evolucionando y, junto con la falta de datos fiables, crean incertidumbres que las empresas deben afrontar.

Por último, Ramón consideró críticamente los retos de integrar el cambio climático en los tres pilares de la regulación de Solvencia y si es aconsejable hacerlo. Señaló el mejor encaje a través de los escenarios ORSA que mediante su consideración a través de los requerimientos de capital.